La Placemaking Week Europe deja su huella en la ciudad de Pontevedra.

Béju y la también artista Sherryl Muriente jutno a las dos esculturas. GONZALO GARCÍA

El artista Béju y su compañera Sherryl Muriente cedieron a la ciudad de Pontevedra una escultura creada en el marco de la cita internacional en la plaza da Ourense.

Durante estos días, Boa Vila también fue testimonio de la participación directa del sector cultural dentro de la programación oficial, con conciertos de artistas locales y sesiones deportivas.

Además de las conferencias, los puestos y las actividades formativas que se han llevado a cabo estos días durante la Placemaking Week Europe, la ciudad de Pontevedra también ha podido disfrutar de experiencias derivadas de las presencias de los visitantes que recorrieron las calles de Boa Vila.

Una de las aportaciones más curiosas que recibió la ciudad fue la donación de una escultura del artista  Bejú y de la artista Sherryl Muriente (su compañera).

El artista, por norma general, crea figuras dudali; humanoides espontáneos y coloridos que ilustran las relaciones humanas. Para la ciudad de Pontevedra ha creado dos figuras distintas al lado de la plaza de Ourense, cerca de la entrada al convento de San Francisco. Una de ellas es azul, y parece pedir ayuda, mientras que la restante, de color rojo (y representando a San Francisco de Asís) se la brinda.

También se ha podido disfrutar de actuaciones musicales de los artistas Cora Velasco, Arturo Delgado y Moucho. Establecimientos locales, bajo el programa municipal de Cabos Soltos, programaron música en vivo en el que se mostró el potencial musical de la ciudad y sus alrededores.